Aunque durante el levantamiento, Patxa’ma está buscando aquello que puede complicar su trabajo, se pueden presentar diferentes situaciones. Existen casos en los que la deconstrucción es imposible, difícil o poco rentable. En otros casos, se complica la reutilización. Las razones pueden ser técnicas, económicas, jurídicas, etc. En este artículo, nos interesaremos en algunos elementos cuya deconstrucción parece particularmente problemática. En consecuencia, no formarán parte del diagnóstico de recursos de Patxa’ma.
Se trata principalmente de elementos cuya instalación está realizada mediante cola o cemento. Es el caso de las baldosas o de mamparas de ducha selladas. Las diferentes piezas de la estructura metálica del frontón parecen también estar soldadas entre ellas. La viabilidad de la deconstrucción en este caso debe todavía ser estudiada. La elección de la técnica de colocación es primordial. Las fijaciones mecánicas facilitan, en efecto, enormemente la deconstrucción y limitan los daños en los materiales durante su recuperación. En numerosos casos, la deconstrucción de los elementos sellados sigue siendo posible, pero a menudo poco ventajosa debido al tiempo complementario necesario o al riesgo de rotura. Y estos frenos, cuando se combinan con un bajo potencial de reutilización de materiales a veces frágiles, suelen ser fatales. Más allá de la técnica de colocación, la elección de materiales resistentes a los ciclos de construcciones y deconstrucciones sucesivas es también importante. Es el caso de los plásticos, por ejemplo, a menudo frágiles y con una versión nueva nada cara. Hay que tener en cuenta también la cuestión del mantenimiento de los edificios y de los materiales que los componen. Los elementos metálicos roñados, la madera atacada por insectos, y cuya reutilización está a veces comprometida, son un freno a la deconstrucción. Bisagras, tornillos roñados, marcos de puerta estropeados por los insectos son más difíciles de desmontar. Patxa’ma recupera puertas y ventanas acompañadas de su marco, que a menudo da problemas, porque está estropeado o porque está hundido en el hormigón de suelo y muros del edificio. Por lo tanto, una técnica de colocación adecuada, la elección de materiales resistentes y un mantenimiento correcto durante su vida útil pueden facilitar el trabajo.
